5 Razones para Dejar Windows y Pasarte a Linux
5 Razones para Dejar Windows y Pasarte a Linux (Guía para Principiantes)
Hola a todos, bienvenidos. Gracias por su visita al blog de Servicios Estratégicos Rentables. Hoy vamos a hablar de algo muy interesante: ¿Por qué deberías dejar Windows y pasarte a Linux?
Acompáñanos mientras exploramos las ventajas de Linux y te mostramos cómo instalar una de las mejores distribuciones para principiantes.
Te comento que he tenido la experiencia de no lograr convencer a algún usuario a migrar a Linux, pero él mismo se decidió una vez que conoció la distribución que te presentamos aquí. Posteriormente ha conocido más casos similares.
Introducción
Cuando compramos una computadora, la mayoría de las veces viene con Windows preinstalado. Sin embargo, también puedes optar por no pagar por ese sistema operativo y pedir al fabricante que te envíe la computadora sin sistema operativo. Existen muchas otras alternativas que podrían ser más adecuadas para tus necesidades, y una de las más populares es Linux.
Pero incluso si no tienes la oportunidad de adquirir el equipo sin sistema operativo precargado, es buena idea dejar Windows y pasarte a Linux, pues el costo del sistema operativo no es el único que habrás de asimilar si usas Windows.
Considera que el costo de un equipo de cómputo no se establece tan solo con el precio de compra. Al costo inicial debes añadir el costo de las licencias de software, lo que contempla los programas antivirus. También debes considerar el costo de la actualizaciones, de la capacitación, del soporte técnico, así como el costo por tener el equipo fuera de uso temporalmente por fallos de hardware, o por incidentes de seguridad. Todo esto junto se conoce como el Costo Total de Propiedad, o TCO por sus siglas en inglés. Considerando el TCO, la diferencia en precio entre la computadora con Windows o sin él, resulta mínima.
5 Razones para dejar Windows y pasarte a Linux
1. Economía
Como ya mencionamos, una de las razones para usar Linux en lugar de Windows es económico. Y es que no gastarás por concepto de pago de licencias. Linux es libre y gratuito.
2. Seguridad.
Te olvidarás de los virus y otro tipo de amenazas a tus datos. Si bien, siempre es conveniente mantener actualizado tu sistema, el riesgo de ataques a Linux es infinitamente inferior que en el caso de Windows.
3. Eficiencia.
Con Linux obtendrás un mejor desempeño de tu equipo. De hecho, una forma de darle mayor vida a esa computadora que ya piensas almacenar, es instalando Linux. Por ejemplo, en este momento (2024), además de mi equipo de escritorio, utilizo un viejo equipo portátil Panasonic Troughbook CF-19M de, aproximadamente, 2006. Me funciona perfectamente con GNU/Debian Linux 12, es decir, la versión actual.
4. Documentación y soporte.
Linux es, desde el siglo pasado, el sistema operativo más y mejor documentado. Además, existen muchísimos foros de soporte, comunidades de usuarios y empresas que te podrán brindar el soporte que requieras, muchas veces, sin costo.
5. Linux es tuyo.
¿Por que aceptar restricciones al pagar por software comercial, si eres dueño de mejores alternativas?
Una invitación
Pero centrémonos en un ejemplo. Veamos una distribución de Linux que resulta sumamente amigable.
Linux es un sistema operativo gratuito y de código abierto. Esto significa que no necesitas pagar por su descarga e instalación, aunque siempre puedes hacer una donación al proyecto. Además, la instalación es bastante sencilla. Solo necesitas descargar la imagen ISO desde la página oficial de la distribución de tu elección y crear un USB o un DVD de arranque.
Las distribuciones de linux son una selección de programas, un sistema de instalación y administración del software, una infraestructura de desarrollo, de soporte y de almacenamiento de versiones. Linux es el núcleo del sistema operativo, y en torno a este núcleo va todo lo demás. Es como el chasis de un auto. Actualmente, muchos fabricantes usan el mismo chasis, pero luego le montan sus propios motores, sus carrocerías, sus acabados y amenidades. Es un mal simil, pero espero que te dé una idea.
Detrás de una distribución de Linux hay fundaciones, comunidades o empresas. Si bien, la selección de programas incluidos suele ser muy similar en la actualidad, hay distribuciones que se enfocan a ciertos nichos. En particular, las hay orientadas a resultar fáciles de usar para usuarios provenientes de otras plataformas, como Windows.
Entre las distribuciones más conocidas están Ubuntu, Debian, Fedora, Manjaro, SuSE, Linux MX y Mint”. Nosotros somos usuarios de Debian, pero esta nota decidimos dedicarla a Mint, pues existe una opinión muy generalizada de que es la distribución más sencilla para usuarios de Windows. De hecho, puedes considerar que fue desarrollada para ayudarte a dejar Windows y pasarte a Linux.
Descarga
Lo primero que requieres es descargar el sistema. Y no, no se trata de un demo o una versión de prueba. Puedes descargar la distribución de Linux que desees, absolutamente gratis.
En este punto debo acotar que existen distribuciones “comerciales”. Se trata de distribuciones editadas por empresas que te permiten su descarga, pero para poder descargar actualizaciones debes pagar. Esto ocurre, por ejemplo, con RedHat y SuSE. Pero existen alternativas a ellas, prácticamente idénticas, e incluso más actualizadas, que no lucran con las actualizaciones. Están, por ejemplo, Fedora y CentOS en sustitución de RedHat y OpenSuSE, en lugar de SuSE.
Nosotros descargaremos Mint, como ya habíamos adelantado.
Para ello, ingresa a la página https://linuxmint.com/
En este caso, hallarás una página en inglés que, al momento de redactar esto, no ofrece versiones en otros idiomas. No obstante, no tendrás problema para llegar a la página de descargas. Puedes hacerlo con la liga que aparece bajo el aviso de la versión vigente (21.3 por ahora) o en la opción Download del menú superior.
Notarás que se te presentan tres variantes (4 de hecho). Estas corresponden a diversos entornos gráficos. Y es que en Linux el ambiente gráfico se “arma” por capas. En una capa inferior está el servidor de ventanas, actualmente X o Wayland, Posteriormente se monta el entorno gráfico.
Las ediciones que encontrarás son
Cinammon
Se trata de un ambiente de escritorio desarrollado por el equipo de Linux Mint, aunque está disponible para muchas distribuciones, por ser software libre. ES la versión más popular de Mint y la más recomendable, si no tienes escasez de recursos técnicos.
XFCE
Esta edición está orientada a equipos de muy bajo desempeño, como pudieran ser computadoras muy viejas. Es un entorno muy austero, pero suficientemente atractivo y amigable, solo que consume pocos recursos.
Mate
Mate es un entorno gráfico derivado de la familia 2 de GNOME (otro entorno). En términos de uso de recursos es intermedio entre los dos anteriores.
Una vez seleccionada la edición de tu preferencia (insisto, recomendamos Cinammon), pasarás a la página donde podrás descargar la firma de verificación y seleccionar un servidor espejo para descargar la imagen ISO. Debes elegir un servidor que esté lo más cerca de ti, geográficamente. Pero es una recomendación, no un requisito.
Cuando hayas descargado la imagen, podrás preparar una USB o un DVD con ella. En esta nota no mostramos esa parte, pero si consideras que lo requieres, haznos saber y gustosamente preparamos una nota al respecto.
Instalación
Una vez tengas preparado tu medio de instalación, sea en USB o en DVD, reinicia tu computadora con ese medio. Es posible que debas modificar la configuración de arranque de tu equipo. O quizás dispongas de un menú de arranque pulsando alguna tecla de función al iniciar el proceso de encendido.
Cuando inicies la sesión con el medio preparado, llegarás a un escritorio que te permitirá trabajar normalmente, para que así pruebes el sistema sin necesidad de instalarlo. El único inconveniente es que estará en inglés. Si decides instalarlo, en el mismo escritorio encontrarás el lanzador del proceso.
El proceso de instalación te guiará paso a paso, permitiéndote seleccionar tu idioma, configuración de teclado, configuración regional, así como una cuenta de usuario. Es de notar que el usuario que defines durante este proceso tendrá capacidades de ejecutar tareas administrativas mediante un esquema conocido como “sudo”. Al establecer los datos de la cuenta del usuario podrás indicar si deseas un arranque automático, o si has de requerir poner tu contraseña.
Terminando el proceso se te solicitará reiniciar y retirar tu medio de instalación.
En este punto es conveniente hacer una observación. Durante la instalación se te pedirá confirmar el formateo del disco. Esto eliminará tu sistema actual. Es posible instalar Linux a la par de Windows, pero ese proceso no lo revisaremos aquí. Si quieres dejar Windows y pasarte a Linux, pero siguiendo una ruta suave, es posible que te interese mantener los dos sistemas en tu disco. Escríbenos si necesitas que expliquemos el proceso.
Una vez terminado, tendrás Linux en tu computadora con muchas aplicaciones preinstaladas, listas para usar, y muchísimas más disponibles, para adaptar tu equipo a tus gustos o necesidades.
Administración del software
Al entrar por primera vez a tu nuevo sistema, se te presentará un asistente que te ofrecerá un recorrido breve. Tú decides si lo revisas y si lo dejas activo para futuros inicios.
Notarás un entorno de trabajo muy agradable y que no te resultará difícil de entender. Puedes revisar las aplicaciones instaladas y comenzar a disfrutar.
Sin embargo, es necesario que sepas que tienes a disposición un gestor de software. Este te permitirá mantener tu sistema actualizado, así como agregar o eliminar aplicaciones, para poner tu entorno a tu gusto.
Una de las inquietudes que te podrían hacen dudar de dejar Windows y pasarte a Linux es el de contar con los programas que requieres para realizar tu trabajo, o no tenerlos. Claro que no tendrás los programas restrictivos, sino otros que realizan funciones semejantes, pero pronto descubrirás que te dan todo lo que necesitas.
Si eres nuevo en Linux, tal vez no tengas en mente alguna aplicación en particular para instalarla. No te preocupes, el gestor de software organiza las opciones disponibles por categoría. Te invito a que explores y pruebes lo que llame tu atención. No tendrás restricciones, más allá de las posibles limitaciones de tu almacenamiento instalado.
Como dato adicional, Linux Mint se basa en Ubuntu LTS, lo que significa que recibe actualizaciones de seguridad y soporte durante cuatro años. Esto asegura que tu sistema esté siempre protegido.
Las actuales distribuciones de Linux, como Mint, ofrecen soporte para el hardware más reciente. Esto incluye CPUs, GPUs, teclados, ratones inalámbricos, y más. Simplemente conecta tu dispositivo y debería funcionar sin problemas gracias a los controladores preinstalados. Descubriras que la configuración de dispositivos es más simple en Linux. Esta es otra razón para dejar Windows y pasarte a Linux.
Conclusión. Dejar Windows y pasarte a Linux es una opción viable.
Esperamos que esta nota te haya convencido de considerar Linux como una excelente alternativa a Windows. Si eres un usuario novato, Linux Mint es una de las mejores opciones para empezar. Creemos sinceramente que dejar Windows y pasarte a Linux es una excelente decisión.
No dudes en escribirnos si consideras que debemos preparar alguna nota complementaria o algún video.
Te invitamos a que hagas una estimación del costo total de propiedad de tu computadora. Verás cómo terminas por decidirte a dejar Windows y pasarte a Linux, y más ahora que has visto lo fácil que es.
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Puedes mirar la versión de video de esta nota aquí.
Gracias por visitarnos.